«El lado oscuro de estar en forma: Henry Cavill y Hugh Jackman revelan los sacrificios necesarios para conseguir músculos en Hollywood.»
En Hollywood, tener un físico impresionante es casi un requisito para interpretar a superhéroes, cazadores de monstruos o protagonistas de películas de acción. Los actores que buscan estos cuerpos musculosos se someten a entrenamientos rigurosos y estrictas dietas durante meses, como hemos visto con figuras como David Corenswet, Henry Cavill y Hugh Jackman. Sin embargo, detrás de esos cuerpos perfectamente tonificados se ocultan sacrificios y un sufrimiento que pocas personas comprenden realmente.
Henry Cavill y Hugh Jackman han revelado los desafíos y el lado oscuro de alcanzar estos físicos envidiables. La idea de emular los cuerpos de personajes como Lobezno, Geralt de Rivia o el Capitán América es casi inalcanzable para la mayoría. Jake Gyllenhaal, por ejemplo, enfrentó grandes dificultades para ajustarse a su papel en su último proyecto. Aunque estos físicos musculosos que vemos en las superproducciones son auténticos y no generados por efectos digitales, alcanzar un nivel de definición y volumen tan extremo no es algo que se pueda lograr de manera saludable ni natural.
Actores como Hugh Jackman, Henry Cavill y Chris Evans han hablado abiertamente sobre los sacrificios que han hecho para conseguir esos cuerpos que lucen en pantalla. Jackman, quien ha interpretado a Lobezno desde el estreno de X-Men en el año 2000, ha sido particularmente explícito sobre los desafíos que enfrenta. Aunque su físico imponente en pantalla puede parecer el resultado de un entrenamiento arduo, Jackman señala que la dieta es el aspecto más difícil del proceso. «El 70% es dieta, solo el 30% es entrenamiento,» ha explicado en varias entrevistas. Para lograr un físico tan definido, Jackman sigue un régimen dietético extremadamente estricto y se somete a una deshidratación severa justo antes de filmar. Esta deshidratación puede implicar la pérdida de hasta 5 kilos en un corto período y puede ser peligrosa para la salud.
Jackman ha advertido sobre los riesgos de este proceso, afirmando que la deshidratación puede llevar a condiciones extremas que desafían los límites del cuerpo humano. En una entrevista en el programa de Stephen Colbert en 2017, Jackman reveló que, para alcanzar un aspecto tan definido, se detiene abruptamente la ingesta de líquidos 36 horas antes de filmar. Además, realiza ejercicios específicos para bombear sus músculos antes de la filmación. «Te acercas lo máximo posible de la deshidratación que te puede llevar a la muerte y después… ¡te pones las garras!» explicó. Aunque el resultado final puede ser impresionante, Jackman ha dejado claro que no volvería a someterse a este proceso.
Henry Cavill, conocido por su papel como Superman, comparte una experiencia similar. Cavill considera que la deshidratación es el aspecto más difícil del proceso. “La dieta es difícil y pasas hambre, pero la deshidratación es la peor parte,” indica. La razón detrás de este proceso es hacer que la piel quede lo más fina posible sobre los músculos, para que se vean más definidos en pantalla. Cavill también menciona que, durante estos períodos de deshidratación, a veces llega a sentir una desesperación extrema. «A veces no ruedas la escena hasta el final del día y te sientes como la persona más miserable del planeta,» confiesa.
Estos actores han dejado claro que alcanzar estos cuerpos musculosos implica un costo considerable para la salud y el bienestar. La deshidratación extrema, las dietas rigurosas y los entrenamientos intensos pueden llevar a consecuencias perjudiciales para la salud. Por ello, los actores advierten a sus seguidores que no intenten imitar estos físicos, ya que lo que se muestra en pantalla no refleja la realidad detrás de cámaras.
En resumen, el sacrificio necesario para alcanzar esos cuerpos musculosos en Hollywood es considerable, y los actores han sido claros al advertir sobre los riesgos y las dificultades asociadas. Aunque los resultados pueden ser visualmente impresionantes, la salud y el bienestar a menudo se sacrifican en el proceso.
